martes, 1 de diciembre de 2009

Entrevista exclusiva a Ante Nittanova: "Todavía no sé lo que es un telo"

Autoexcluido de la vida pública desde el malentendido del telo, Ante Nittanova intenta ahora reinsertarse en el ecosistema nativo: en la cocina de la casa del nonno, actual sede de nuestra redacción, algunos miembros del estaf de esta Revista lo entrevistaron hoy a mediodía.

Ante Nittanova: -Permisooo...
Omar Garito: -¡Ooopa! ¡Mire quién apareció, Nono! ¡Eche los fussili, que estamos todos!
A. Nittanova (sacando pelvis): -...
O. Garito: -¡Sacáte ese relleno del taparrabo, querés! Si hasta mi vieja te vió en tarlipes... Pensar que a esta Isla te traje yo, soy un gil...
Nonno: -Lo che natura non dá, la guata non presta...
A. Nittanova: -Cómo anda, abuelo. Yo venía para...
Evelyn Gómez (desde la compu): -¡Ante Nittanova! ¡Al fin lo veo! ¿Me viene a revisar el teléfono? Es un porquería, lo tengo desenchufado.
A. Nittanova: -Sí, sí, estoy tras ese temita, pero quería...
O. Garito: -Dale, que tengo que salir. Hacela corta, ¿qué querés?
Dra. Romero (ingresando): -¡Bien, Ante! ¡Afronte, usted puede, recuerde lo que charlamos!
A. Nittanova: -¡Doctora! Gracias por venir, de verdad...
O. Garito: -¡Dale, macho! ¡Desembuchá! ¿Vió, nonno? Este es un novelero, otra que Arnaldo André...!
Nonno: -Ma qué André, ¡Marcello Mastroianni!
A. Nittanova: -Estee... Quiero darles una nota.
O. Garito: -Bueno, dejásela al nonno y rajá. Andá a sacarte el puyáp, ridículo.
A. Nittanova: -No, Omar. Una nota, una entrevista, una exclusiva.
E. Gómez: -¡Sonamos, más para pasar a la compu!
O. Garito: -Uh, paren las rotativas que el señor quiere una entrevista, ¿quién sos? ¿Federico Leluár? No sé si les va a interesar, al estaf. Yo me voy a dar clase, bancá que están por llegar las directoras. Que te garúe finito, eh.
A. Nittanova: -Chau, Omar. Saludos a tu mamá.
O. Garito: -¡Se te habrá escapado, lavate el comedor antes de hablar de la vieja! (portazo)
Nonno: -¡Per la madonna, la porta, la porta!
(Llegan las directoras y el confesor virtual)
Carolina Agostino: -¿Qué pasa, nonno? No me diga nada, el Omar...
Vera Ovejero Paz (codeándola): -¡Mirá quién nos honra con su visita!
C. Agostino: -Ante Nittanova, qué sorpresa, ¿qué lo trae? (risas contenidas)
A. Nittanova: -Vengo a darles una nota. Ahora, si puede ser.
C. Agostino: -Nos íbamos a hacer la toca, pero bueno... si está apurado...
V. O. Paz: -Evelyn, poné rec.
E. Gómez: -A ver, Ante, siéntese acá.
C. Agostino: -Empecemos. ¿Listo?
A. Nittanova: -Estoy un poco nervioso.
D. Romero: -Tranquilo, Ante. Va a poder. Autoestima, ante todo autoestima.
V. O. Paz: -En principio, se me ocurre preguntarle por qué eligió ese nombre para el emprendimiento. ¿Usted quiso generar toda esta confusión? ¿Actuó de mala fé?
A. Nittanova: -Deje que le explique...
C. Agostino: -¡Porque la verdad es que lo que menos esperábamos era un teléfono!
V. O. Paz: -Sí, ¿no nos vió haciendo cola con los taparrabos de encaje? ¿No podía haber avisado? ¡Yo hasta me depilé!
Padre Armando: -Y yo pensé que al fin el señor se había apiadado de mis años de castidad... Pero después, con lo que me confesaste, hijo, quedé patitieso. ¡Seis centímetros no alcanzan ni para mea culpa!
A. Nittanova: -¡Padre! ¿La confesión no es secreta?
P. Armando: -Hijo mío, ¡si te vieron todos! Tampoco voy a andar contando que todavía no debutaste, ni que...
C. Agostino: -¡Ah, bueno, este pobre tipo no conoce lo que es un telo, con razón...!
E. Gómez: - A mí me tiene sin cuidado su vida sexual, pero el teléfono funciona para el tuje. Y encima se liga, acá llaman y cortan, o se me quedan respirando... Y no es a mí sola, eh ¿Qué dice, Ante? ¿Qué pasa con las líneas?
Salustiano Gancedo (recién llegado): -¡Vooos! ¡Vos acá! (agarrándolo del cuello) ¡El enemigo público número uno!
Nonno: -Piano, piano...
D. Romero: -¡Salustiano, suelteló! (inyectándole una endovenosa de orégano que lo deja balbuceando). Bajemos un poco el tono de la charla (convidando píldoras), hay muchos malentendidos, pero si escuchan a Ante, él tiene varias cosas para decir. Ustedes no saben que se deslomó para cablear la Isla toda, luego vino el bochorno público en plena plaza, después recibió anónimos... Le cantaban "El manisero"... ¡Y vos, Evelyn, te quejás porque te preguntan por la familia Gallo!
A. Nittanova: -Estuve investigando, y todas las cargadas salen del teléfono de la Guardería Agarrame el Mocoso.
C. Agostino: -¡Ésta Nan y su pedagogía moderna!
D. Romero: -Ante estuvo muy mal con todo ésto...
S. Gancedo (recuperando el habla y la motricidad): -¡Porque yo no! ¿Sabés la de minitas que había invitado a la inauguración del telo? ¡Ahora piensan que las quise cachar, que estaba al tanto de la chanza!
C. Agostino: -Pará, Salus. La torda tiene razón, escuchemos a Ante.
D. Romero: -Ante puede explicar todo. ¿Nocierto, Ante?
A. Nittanova: -Yo... ¡yo no tenía idea!
S. Gancedo: -Caradura...
D. Romero: -¡Salustiano!
A. Nittanova: -No sabía, ni sé todavía lo que es un telo.
S. Gancedo: -Dejate de joder, ¡tu vida es un tango! (canturreando) "Nuunca tuvo nooovia pobreciitooo"
P. Armando: -¡Shhh!
A. Nittanova: -Me llamaba la atención que todos se emocionaran hasta las lágrimas cuando les contaba del proyecto... Era decir telo y encontrar inmediata aprobación, pero qué sé yo... acá en la Isla siempre están todos entusiasmados... ¡terminó pareciéndome normal!
S. Gancedo: -¡No tenés perdón! Me hiciste quedar como un paparulo con las minas, hasta me llaman para cargarme, "qué hacés La Martona, quedó mucha leche?". ¿A vos te parece, el garrón que me estoy comiendo? (levantando presión) ¡Te viá bajar todos los dientes! ¡Agarrame que lo mato!
Ullrico Ludwig Von Schlutter (saltando desde la ventana en posición de patada voladora): -¡Iaaaa! ¡Catch! ¡Pum! ¡Piff! (inmovilizando al lanzallama) ¡Chac!
S. Gancedo: -¡Pará, soltame, me tenés trabado y encima me apoyás! ¡Con eso no se jode, papá!
V. O. Paz: -¡Romero, intervenga!
C. Agostino: -¡Intramuscúlelos!
V. O. Paz: -Terminemos con esto, o no nos va a quedar tiempo para hacernos la toca...
(La Dra. Romero aplica a cada uno la dosis de rutina. Recostamos a los tres intramusculados, semiinconscientes, en el catre del nonno)
Nonno: -M´stano babeando l´almoatta, médica métale questo repassadore.
E. Gómez: -¿Qué hago? ¿Apreto pause?
C. Agostino: -Apagá, directamente; y traé los ruleros. Total, hasta que vuelvan en sí...
V. O. Paz: -Parece mentira, che, tipos grandes...
P. Armando: -Amén.

4 comentarios:

Carolina Agostino dijo...

chicos, nada, pero creí que este episodio no salía de la redacción...
Evelyn ¿a vos se te ocurrió desgrabar TODO? te faltó contar cuando me soné la nariz...

Soy Evelyn Gómez con quién desea hablar? dijo...

Me lo pidió Vera, pensé que las dos estaban de acuerdo...

Esperanza dijo...

¿Y esto era el notición? Escúchenme, aquí estoy por despachar a las Azores 2 MNR (maridos no reclamados)que quedaron de la inauguración frustrada del telo. En un par de horas sale el barco con la carga. Lo podemos embalar a Ante con los MNR, como repuesto o algo así, y listo. Aquí ya no da para más y es injusto que lo hayan intramusculado a Salustiano, que tenía muchos motivos para estar enculado con Ante.
Pobre Salus, ayer apenas podía sostener las cartas y casi le hacen Chancha dos veces. Y Salus, con todos sus defectos, es de la isla de toda la vida y nunca le negó un favor a nadie.
Todo por un tonto que no sirve ni para espiar. ¿¿¿Qué catzo le ve a Ante, doctora, que lo defiende tanto???

Psiq. Romero dijo...

Esperanza querida:
estudié más de siete años en el continente para recibirme de psiquiatra y no dejo de actualizarme con bibliografía de todas partes del mundo.
Pero si no fuera por algunos pocos turistas que sufren crisis de identidad en la playa, sólo me dedicaría a coordinar grupos de autoayuda, elaborar test y neutralizar nerviosos y/o violentos sublinguando, intramusculando y envodenando...
Mi materia prima son los humanos conflictuados, y en una isla donde todos están tan seguros de sí mismos, donde la culpa practicamente no existe, no puedo desarrollar plenamente mi profesión.
Entonces conocí al señor Nittanova, un ser con complejo de electra, complejo de inferioridad, tímido, con baja autoestima, culposo, indeciso y que porta un conflicto irresoluble entre las piernas.
Lamentablemente, por estos días es el único paciente que viene puntual y regularmente a atenderse. Por eso lo defiendo, espero que entiendas que no es un capricho, es una necesidad.
Abrazos!